Katy Perry vuelve a sonreír. Esta semana la hemos visto volcada en su trabajo, con nuevo look... ¿y con nueva compañía?
Pues sí. Parece que la cantante ha encontrado un hombro en el que llorar sus penas: el de uno de los bailarines que la acompañan en su gira, Malik Le Nost, con quien dicen que ha congeniado de una forma especial.
«En la prueba de sonido el día del último show, a ambos les dio un ataque de risa por una broma privada. Era como si fueran una pareja; Malik le lanzaba guiños a través del escenario y la llenaba de abrazos», aseguran fuentes del entorno de la artista a The Mirror.
Según los rumores que circulan, todo podría haber empezado en Manila, cuando la cantante y el bailarín se quedaban charlando muchas noches. Tal vez Malik intentaba consolar a Katy por los malos momentos que estaba viviendo, tras su sonado divorcio de Russell Brand.
Aunque todavía es un poco pronto para sacar conclusiones, ¿crees que veremos un nuevo caso de relación entre cantante y bailarín, como Madonna, Britney Spears o el reciente de Jennifer Lopez y Casper Smart?
De momento, nos alegramos viendo a Katy sonriendo de nuevo.
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